Poder en Cuba – 2018

En una entrevista exclusiva ofrecida el día 4 de mayo de este año a la BBC titulada: Mariela Castro, hija del presidente Raúl, asegura que no habrá más Castros en el poder en Cuba, Mariela afirmó que no habría más Castros en el poder a partir del momento en que su padre se retire en el 2018.

El apellido Castro se encuentra en el poder desde el 1959. En el año 1976, los Castro establecen una nueva constitución, en la cual definieron la estructura del Estado. La constitución del 1976, con sus posteriores modificaciones, establecen que los cuatro principales cargos del poder en Cuba sean ocupados por una sola persona. Son estos: el Primer Secretario del Partido, el Presidente del Consejo de Estado,  el Presidente del Consejo de Ministros y el Presidente del Consejo de Defensa Nacional. Todos estos cargos fueron ocupados por el tío de Mariela Castro desde el 1976 hasta el 2008.

Los cargos que sustituyen a la presidencia de estas instituciones también fueron diseñados para que fueran ocupados por una sola persona, en este caso, por el padre de Mariela. Son estos: El del Segundo Secretario del Partido Comunista de Cuba, el del Primer Vice Presidente del Consejo de Estado, el Vice Presidente del Consejo de Ministros, y el Ministro de las Fuerzas Armadas. Es también miembro del Consejo de Defensa Nacional. Su padre pasó a ocupar las posiciones ocupadas por su tío, una vez que sus fuerzas no le permitieron ocuparse más de sus responsabilidades. Su madre, Vilma Espín, ocupó los cargos de la presidencia de la Federación de Mujeres Cubanas, desde su fundación en 1960 hasta su muerte, en el año 2007. La presidenta de la FMC tiene además su cargo asegurado en el Consejo de Estado.

La Asamblea Nacional, en teoría, controla los cargos del Consejo de Estado y de Ministros, pero en la práctica, no tiene presupuesto, ni mecanismos, ni estructuras, ni tiempo para controlarlos. No tiene ni siquiera posibilidades de anular decretos inconstitucionales establecidos por el gobierno. Por poner solo dos ejemplos, la prohibición de residir en La Habana para personas de otras provincias y la discriminación a los cubanos residentes en el exterior.

Además, el Consejo de Defensa Nacional, a petición del Presidente del Consejo de Estado, siendo la misma persona, puede declarar el Estado de Emergencia e inhabilitar el trabajo de la Asamblea Nacional hasta el momento que él lo decida, sin límite de tiempo. El siguiente gráfico muestra los poderes que tiene esta institución.

Por supuesto, después del retiro de su padre de los principales cargos del Estado en el 2018, estos cargos serán ocupados por otra persona. Pero para que el apellido Castro desaparezca de las estructuras del poder, es imprescindible la renuncia de su hermano, Alejandro Castro Espín, de todos sus cargos. El presidente a nombrado a su hijo como Presidente del Consejo de Defensa y Seguridad Nacional, institución no definida por la Constitución. Alejandro ha sido el encargado de firmar los acuerdos militares e informáticos con Rusia (en lugar de hacerlo del ministro de las FAR). Recientemente el Cardenal Jaime Ortega declaró de que él fue el responsable de las negociaciones para reestablecer las relaciones entre Cuba y los Estados Unidos en lugar del Ministro de Relaciones Exteriores y del  Departamento América del MINREX). La presidenta de este último departamento, había sido anunciada como responsable de este proceso, pero tal como reveló el Cardenal Ortega, esto no fue cierto.

Su hermano tiene mucho más poder que el poder que tienen los representantes de las instituciones oficiales. También, la misma Mariela Castro, a pesar de ser solo la presidente de una organización dedicada a defender los derechos de los homosexuales revolucionarios, es capaz de asegurar y garantizar como se va ha desarrollar el proceso de cambio de poderes en el 2018.

El problema principal de la transferencia de poderes en el año 2018, es que el presidente ha ido creando un estado mercantilista paralelo al Estado Cubano. Todas las actividades económicas fundamentales del país están en mano del grupo GAESA, que tiene todo el marco legal necesario para funcionar de forma independiente del Estado. Un estado arruinado, que funciona en pesos cubanos, con infraestructuras deterioradas que no generarán ganancias, con problemas de todo tipo acumulados por más de 60 años y una deuda externa significante.

El grupo GAESA controla el turismo, el puerto del Mariel, su logística y la divisa convertible. Tiene empresas empleadoras que son capaces de pagar salarios 10 veces mayores a los que paga el estado cubano, dejándolo sin opción para competir por la fuerza de trabajo más preparada. El recientemente inaugurado Hotel Kempinski fue reconstruido utilizando la Empresa de Construcciones Militares, y no a una empresa del Ministerio de la Construcción. Tienen un sistema de educación, independiente del Estado, que en este año tienen más plazas que otras escuelas, por supuesto a ellas irán los alumnos más inteligentes o los vinculados a sus familias.

Controlan también las comunicaciones y el comercio interior. Las tiendas TRD les pertenecen, dejándole al estado todo el sistema de la OFICODA, con sus bodegas y libretas de racionamiento. Los teléfonos en pesos cubanos morirán por su propio peso mientras que se adjudican la exclusividad de la telefonía celular hasta el año 2023.

El transporte en buenas condiciones, con aire acondicionado y combustible garantizado pertenece a GAESA mientras que el inexistente transporte público pertenece al Ministerio del Transporte. Los restaurantes y centros de diversión de calidad pertenecen  GAESA mientras que las casas de la Música pertenecen al Ministerio de Cultura. Las empresas importadoras controlan la distribución de alimentos mientras que el Ministerio de Agricultura y su ACOPIO reducen sistemáticamente la producción dentro de la isla y permiten que se eche a perder el 57% de lo que se produce en el campo.

A pesar de la gran sequía que afecta a Cuba, el agua disponible se utilizará para regar los campos de golf que construirá GAESA. Un campo de golf consume 2,3 millones de litros de agua al día, que representan 777,5 millones de litros al año. Al mismo tiempo, el Instituto de Recursos Hidraulicos permite que se derroche el 58% del agua que se distribuye y falta el agua en las casas, para la agricultura y la ganadería.

El estado controla los carnés de identidad mientras que la Consultoría Jurídica controla los pasaportes y los documentos válidos en el extrangero y el de los cubanos en el exterior para su uso en Cuba. A los hospitales para extranjeros y altos cargos del gobierno no pueden entrar los que no tienen medicinas en las farmacias. Si una persona necesita llamar a una ambulancia por una emergencia, necesita primero llevar a su familiar al médico de la familia para que lo autorice. Este procedimiento seguramente no existe para la élite del país y de GAESA.

El grupo está también controlado por su familia, aunque su presidente no lleve el apellido. Este poder también tiene que ser cedido al estado cubano y sus instituciones para que Mariela Castro, pueda garantizar de que no haya más Castros en el poder.

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