Derechos Humanos

Al terminar la ronda de negociaciones efectuada el 26 de enero del 2015, La Directora del Departamento de Estados Unidos, Josefina Vidal, ratificó que existen profundas diferencias entre los gobiernos de Estados Unidos y Cuba con respecto al respeto de los derechos humanos y la democracia, expresó su preocupación por la violación de estos derechos en Estados Unidos y declaró que Cuba tiene “experiencias interesantes” que pudiera mostrar y compartir, como ejemplo de lo que ha hecho Cuba para mejorar los derechos humanos, no solo en Cuba sino también en el resto del mundo.

Es bueno recordar que Cuba fue uno de los países firmantes de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre en 1948.El diplomático cubano y secretario general de la delegación cubana, Guy Pérez de Cisneros expresó su agradecimiento a las Naciones Unidas por haber acogido favorablemente textos inspirados por dos enmiendas cubanas que reconocen, en el campo del trabajo, el derecho de seguir libremente su vocación, y también el derecho que ha de tener todo trabajador a recibir una remuneración equitativa y satisfactoria que le asegure, así como a su familia, una existencia conforme a la dignidad humana, y que sea completada de ser necesario por cualesquiera otros medios de protección social.

El primer concepto en el que difieren los gobiernos de Cuba y Estados Unidos es el de democracia. El gobierno de Cuba entiende por democracia, la suposición de que cuenta con la mayoría del pueblo de Cuba para permanecer en el poder y a la univocidad en la decisión de todo el pueblo de construir el socialismo.

El concepto de democracia sin embargo no está relacionado solamente con la ejecución de la voluntad de la mayoría, ya que la regla de la mayoría puede volverse antidemocrática cuando afecta derechos fundamentales de las minorías o de los individuos. Hitler no era democrático por mucho apoyo popular que en apariencia le dieran sus escaños electorales, ya que fue extremadamente cruel con un determinado grupo de personas que el declaró enemigos de la humanidad. En verdad, la historia ha demostrado que fue el miedo generalizado lo que más se popularizó en la Alemania de Hitler.

La democracia consiste en limitar el poder de la mayoría para evitar que se violen los derechos y la libertad de ciertos grupos que no deben ser restringidos bajo ningún concepto. Para evitar esto, se establece el estado de derecho, o un conjunto de reglas para regular la relación entre el estado y cada uno de los individuos, donde estas reglas son estables, claras y transparentes y donde el individuo puede predecir en todo momento el comportamiento del estado en base a la ley y no en base a una decisión arbitraria de un funcionario.

Cuando hablamos de derechos humanos, hablamos de la relación entre el estado y el individuo, un individuo y no un grupo de individuos. Este concepto fue la base para el establecimiento del “derecho de las naciones a la autodeterminación y a la no intervención en sus asuntos internos”. Declaración que tanto defiende Josefina Vidal.

Más aun, la primera parte de la Declaración 36/103 de la 91 asamblea de las Naciones Unidas firmada el 9 de diciembre de 1981, sobre la inadmisibilidad de interferencia en los asuntos internos de otro estado expresa que todo estado debe abstenerse, directa o indirectamente de presionar e interferir en los asuntos de otro estado. Los estados deben también asegurarse de que  su territorio no sea utilizado de ninguna manera para violar la soberanía, la independencia política, la integridad territorial, ni para interrumpir la estabilidad política, económica y social de otro estado. Los estados deben abstenerse de organizar, crear y ayudar a grupos terroristas, saboteadores y grupos subversivos que puedan desestabilizar a otro estado. Los estados no deben enviar ni entrenar mercenarios a otro estado así como enviar tropas a otro estado sin su consentimiento. En Cuba, se han visto sobrados ejemplos de violación de todas estas normas desde el 1959.

Ahora bien, este derecho que tienen los estados no contradice de forma alguna las resoluciones de las Naciones Unidas relacionadas con la protección de los derechos humanos. La segunda parte de esta declaración expresa que al mismo tiempo en que los estados deben hacer respetar su soberanía, también deben cumplir con sus obligaciones y deben defender, proteger y promover todos los derechos fundamentales dentro de su estado, deben introducir y hacer cumplir leyes que permitan la protección efectiva de los derechos humanos, sobre todo la eliminación de toda discriminación racial.

Los derechos humanos fundamentales (civiles y políticos vinculados a la libertad) están excluidos de los derechos reservados a los estados, están excluidos de la jurisdicción estrictamente nacional y estos derechos están sujetos a los mecanismos internacionales de protección de los derechos humanos. Es imprescindible respetar los derechos humanos si se quiere que todos vivan con dignidad, lo cual es una de las piedras angulares de la Constitución cubana.

Uno de estos derechos fundamentales es el derecho del ser humano a que las elecciones le permitan contribuir a la vida pública y política del país, a elegir a sus gobernantes y a ser elegido. El 30% de los miembros del consejo de estado y de ministros sobrepasa la edad de jubilación. Fidel y Raúl castro han ocupado desde el 1959 los cargos superiores del gobierno, del estado, del partido y de los ministerios por más de 181 y 158 años en total respectivamente, lo que demuestra que la ley electoral no es eficiente en la protección de esos derechos. Otros derechos como la libre entrada y salida de su propio país, siguen siendo restringidos, mientras el estado hace de la separación de las familias un tremendo negocio. Cuba se encuentra entre los peores países del mundo en cuanto a la libertad de expresión y acceso a internet, las detenciones arbitrarias; los tratos degradantes y destierros siguen ocurriendo frecuentemente.

La segunda generación de derechos está relacionada con los contenidos sociales para mejorar las condiciones de vida. Están relacionados con el derecho a la educación, al trabajo en condiciones satisfactorias, a formar sindicatos, a la seguridad social y a la seguridad pública así como a tener un salario justo para tener un nivel de vida decente.

La tercera generación de derechos está relacionada con los derechos de los pueblos a la paz, al desarrollo, a la autodeterminación, a la solución de los problemas alimenticios, demográficos, ecológicos, al patrimonio común de la humanidad y al respeto al medio ambiente.

Los derechos humanos también se dividen en dos grupos: los materiales, tales como el derecho a la educación, a la no injerencia del gobierno en ciertos asuntos y a la libertad de expresión, etc. y los procedurales, o sea todo el sistema que permite a los ciudadanos defender sus derechos ante el abuso de estos por parte del gobierno. De estos últimos, en Cuba no hay absolutamente ningún sistema de control sobre lo que hace el gobierno, ni de apoyo a los ciudadanos.

Los modelos europeos y americanos de protección de los derechos humanos se diferencian. En el caso de los Estados Unidos la construcción del estado está basada en la libertad del individuo del estado, o sea el individuo puede hacer todo lo que no está prohibido por la ley, y puede hacer todo lo que necesita para alcanzar su felicidad y el estado no debe molestarle en alcanzarla. Los derechos se pueden limitar solo para alcanzar objetivos específicos y en aquellos casos donde se vea afectado el bien común.

En el caso de Cuba, el sistema de protección de los derechos humanos está basado en el sistema soviético, donde el individuo solo puede hacer lo que “está permitido o establecido por el estado”. Es inadmisible que todavía existan ciertos derechos que tienen algunos individuos en Cuba, que no tienen como objetivo alcanzar el desarrollo y prosperidad de la nación, sino más bien asirse del poder y del control del pueblo.

El otorgamiento de derechos no sirve de mucho si no hay mecanismos y procedimientos que le permitan al ciudadano defenderse de los abusos del estado. Una clara definición, es el balance y la separación de los poderes ejecutivo, judicial y legislativo. Así mismo,  la creación de mecanismos para que se controlen mutuamente de forma efectiva es fundamental para que se respeten los derechos humanos y se pueda garantizar la dignidad del hombre. Un país es más democrático, mientras más esté protegido sus individuos de los abusos del estado.

Estas profundas diferencias entre los modelos del gobierno cubano comenzaron con la eliminación de los artículos de la constitución del 1940 que garantizaban derechos individuales tales como el derecho a la propiedad individual y privada, a residir en la patria, a salir y entrar de ella sin permiso, a que todos sean iguales ante la ley, a la prohibición de la confiscación de bienes, a la prohibición de la pena de muerte, a la presunción de la inocencia, al registro público de presos y detenidos, a la condena solo por un tribunal competente, al secreto a la correspondencia, a la libertad de expresión y su difusión por todos los medios disponibles, al derecho de asociación y reunión, a formar partidos políticos y sindicatos, a la restricción de libertades solo por un período determinado, al salario mínimo de los maestros, a la autonomía de la universidad, a la posesión y disponibilidad de su propiedad incluyendo empresas, las cuales por obligación deben tener iguales o mejores condiciones para invertir que la del capital extranjero, a la herencia, al pago del salario en mercancías, al derecho a huelga, al derecho al sufragio de todos los ciudadanos, a la separación de poderes, al funcionamiento de los tribunales de cuentas y constitucionales, a la independencia del poder judicial, a la obligación del gobierno de rendir cuentas, a la eliminación de leyes y acciones que sean declaradas anticonstitucionales, a la necesidad de aprobación de los gastos y presupuestos del estado y al funcionamiento de monopolios privados, entre otros.

Tras la eliminación de los derechos vinieron las “experiencias interesantes” como por ejemplo la desintegración de las familias, los fusilamientos sin las debidas garantías procesales, la creación de campos de trabajo forzado tales como las UMAP, las numerosas condenas de 20 y 30 años de cárcel por disidencia pacifica, la confiscación de todas las empresas incluyendo las empresas unipersonales, la eliminación de todo tipo de prensa independiente del partido, los destierros, las cláusulas de peligrosidad social y la ley contra la vagancia, los expedientes acumulativos del escolar, las comprobaciones laborales y para salir del país en los CDR, la prohibición de salida del país de familiares de personas que decidieron quedarse, la guerra contra la iglesia, y el acoso a los católicos, el uso del trabajo voluntario como forma de eludir el pago por el trabajo, la confiscación de bienes par la salida del país, los actos de repudio, la prohibición a los miembros del partido a contactarse con sus familiares en el exterior, la eliminación de la navidad y la creación de organización inconstitucionales tales como el grupo de apoyo al comandante y la consultoría jurídica internacional, por solo mencionar algunos.

La falta de transparencia y el ostracismo en el que permanece subsumido el pueblo de Cuba, no le permite tener acceso a fuentes de información recientes sobre estos temas. Por ejemplo, sería de gran utilidad que en los hogares cubanos pudiera leerse y discutirse el documento emitido por la Oficina para la Promoción de la Democracia Parlamentaria (OPDP), “La democracia revisitada ¿Qué concepto de democracia debe prevalecer en las relaciones exteriores de la UE?”[1]. El documento enumera y analiza “Elemento esenciales de una democracia”:

• Elementos esenciales de una democracia
• Participación en los asuntos públicos sin discriminación y el derecho a ser elegido  y a votar en las elecciones
• Libertades de expresión y opinión, de asociación y de reunión
• Separación de poderes
• La función del Parlamento
• El Estado de Derecho
• Sistema pluralista de organizaciones y partidos políticos
• Transparencia y responsabilidad
• Medios de comunicación libres

Estos elementos deberían ser difundidos por los medios de comunicación masiva del país, para que el pueblo pueda conocer y en última instancia comparar (se) con otras naciones, enterarse de cuáles son los elementos que se toman en cuenta en las discusiones gubernamentales, saber de qué se habla cuando se discute sobre democracia y de derechos humanos en Cuba, y cuán vinculados están estos a los tiempos modernos y a la valoración sobre la condición humana que prevalece en mundo.

[1]“La democracia revisitada ¿Qué concepto de democracia debe prevalecer en las relaciones exteriores de la UE?” (2009). Oficina para la Promoción de la Democracia Parlamentaria.

http://www.europarl.europa.eu/pdf/oppd/Page_1/OPPD-La_democracia_revisitada.pdf

Visitado el 18/03/2015.